miércoles, 22 de febrero de 2012
UNIVERSIDAD DE MONTERREY
DIVISIÓN DE EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR
UNIDAD HUMBERTO LOBO
ACADEMIA DE LENGUA Y COMUNICACIÓN
Reportaje: ¿Quién controla tus pensamientos?
Monterrey, N.L., a 18 de abril de 2005¿Quién controla tus pensamientos?
Los mensajes subliminales son mensajes que llegan a las personas que están expuestas a éstos de una manera inconsciente. Juan Pablo Regimbal, en su artículo El Mensaje Subliminal es una Violación de la Conciencia, dice que “la palabra subliminal viene de la etimología latina de subliminal: sub-bajo, limen-umbral (límite), es decir, debajo del umbral. Se trata de un mensaje destinado a llegar al oyente justo por debajo del umbral de la conciencia; este mensaje escapa al oído, a los ojos, a los sentidos externos y penetra en el subconsciente profundo del oyente, el cual está completamente sin defensa contra esta forma de agresión. Al recibir los mensajes subliminales, éstos atacan traicioneramente al receptor, pues esquivan las barreras de la selección inteligente y consciente aceptando automáticamente los mensajes (…). El trabajo del inconsciente entonces no puede controlarse y éste opera con los elementos que recibe, como en los sueños, en los cuales se mezclan, inconscientemente, imágenes y hechos de una forma no previsible.”
En 1957, Vance Packard publicó un libro titulado "The Hidden Persuaders" donde expone las técnicas publicitarias usadas por algunas compañías para promover sus mercancías. Estas técnicas son consideradas deshonestas por Packard porque aplican conceptos psicológicos que, según él, persuaden a las personas a comprar artículos innecesarios.
Años más tarde, Wilson Key publicó otro libro titulado "Subliminal Seduction" (1973), donde él también ataca a los medios publicitarios que usan técnicas psicológicas con el fin de incrementar sus ganancias sin mostrar ninguna consideración por el consumidor.
Este tipo de mensajes son usados por los medios de comunicación para “controlar” a la sociedad, ya sea para hacerla consumidora o para incitarla a manifestar alguna conducta; la manera más común en la que se transmiten dichos mensajes es usando la técnica llamada “reverse speech”, que consiste en colocar un mensaje con las palabras al revés; esto es, en vez de esconder el mensaje “sigue a Satanás”, esconder el mismo mensaje con las letras al revés (sanatas a eugis) para que la conciencia no pueda detener éste tipo de mensajes.
En una investigación realizada en 1996, publicada en el Journal of General Psychology, experimentaron con 17 personas a quienes les hicieron escuchar grabaciones en las que iba aumentando la intensidad de los mensajes ocultos, y se les preguntaba si escuchaban algo que sonara como palabras. El resultado fue que después de los 30 decibeles, estos mensajes eran percibidos; es así como algunos medios de comunicación utilizan los mensajes subliminales, poniéndolos a un nivel de decibeles en el que no se puede percibir fácilmente el mensaje, pero sí de manera inconsciente. Aún cuando científicos como Dixon y Henley (1991), y Swingle (1992) han hecho otras investigaciones sobre este tipo de mensajes, aún no se ha llegado a una conclusión completamente correcta sobre cómo es que afectan a las personas o cuánto tiempo se tiene que estar expuesto a éstos. Reid, científico que realizó su investigación en 1990, sugirió que se necesitan de 15 horas continuas para que los mensajes subliminales puedan tener un efecto sobre la persona expuesta; considerando que los medios de comunicación nos bombardean constantemente con mensajes al inconsciente, es de esperarse que la sociedad se vea afectada.
En la mercadotecnia, los mensajes subliminales son muy utilizados y su efectividad fue comprobada en uno de los experimentos más famosos que se realizó en un cine de New Jersey, E.U.A., en los años 50. Éste consistió en poner mensajes subliminales en la película "PICNIC". Cada 24-30 fotogramas aparecían las palabras "Tome Coca-Cola" y "Coma palomitas" sobre el rostro de la actriz Kim Novak. Se consiguió aumentar las ventas de Coca-Cola en un 18% y las de palomitas en un 58% respectivamente.
Pero no todos los mensajes subliminales nos hacen esclavos de la mercadotecnia o de diferentes conductas; también se han utilizado en la medicina con fines curativos. En la Clínica Médica McDonagh de Gladstone, en Missouri (E.U.A.), se aplicó este tipo de mensajes para relajar a los pacientes. Los resultados fueron favorecedores, los enfermos dejaron de sufrir desmayos y mejoraron, pero volvieron nuevamente a desmayarse cuando los privaron de los mensajes.
¿Cómo afectan a la sociedad?
Los mensajes subliminales, incluidos en la música más famosa de todos los tiempos, cambian la manera en que las personas que los escuchan perciben las cosas. Muy claros son los ejemplos que vemos hoy en día. Cuando Eminem rapea el coro de la canción “My name is”, se percibe perfectamente el nombre del cantante: cuando se escucha al revés, el mensaje dice “It is Slim, it's Eminem, it's Eminem, it's Eminem”. Aunque no es nada maligno, las personas que escuchan este canto saben el nombre del artista, aunque nunca lo hayan escuchado decir.
Está claro que los mensajes subliminales transmiten información que los artistas no quieren decir directamente, y al ocultarlos encuentran una forma de expresarse sin tener que dar la cara. Ahora bien, los afectados por este acto son los fanáticos, quienes todos los días escuchan a sus artistas favoritos. ¿Cómo afectan? Afectan la manera de pensar, la manera en que sus escuchas perciben el mundo. Si con el simple hecho de que la sociedad nos bombardea día a día con publicidad con mensajes sexuales, sólo hay que imaginar lo que afectaría el escuchar mensajes sexuales en cada estación de radio. El problema es que ni siquiera somos conscientes de que por su culpa pensamos diferente. Hoy en día, un niño de 11 años ya piensa en actos relacionados directamente con el sexo, todo por culpa del constante bombardeo de los medios.
Como ejemplo de cómo la música afecta el cerebro, tomaremos en cuanta al hit mundial Pokémon. Cuando escuchamos al revés una canción de la serie infantil, llamada “Pokémon Rap”, se aprecia que dice “I love Satan, I love Satan” (amo a Satán, amo a Satán). ¡Pero qué diablos escuchan los niños!
¿Còmo puedo evitar o darme cuenta de que hay un mensaje?
El mundo en el que vivimos actualmente se encuentra infestado de publicidad sin importar en dónde estés, ya sea en tu hogar viendo la televisión o escuchando la radio, en el carro mientras te diriges a algún lugar ya no se puede observar un paisaje natural, lo único que se puede ver es una ciudad inundada de anuncios panorámicos que te inducen a querer comprar productos, a hacer cosas que nunca hubieras pensado -o que de no haber sido porque en el anuncio una modelo lo está haciendo- hubieras pensado que es algo malo. Ver publicidad y mensajes ocultos en todos lados es algo que no se puede evitar, pero hay ciertas cosas que se pueden hacer para evitar caer en los juegos de la mercadotecnia.
Al escuchar música, una forma de evitar canciones con mensajes ocultos es seguir los siguientes pasos:
Comprender la letra: es lo más fácil, entender lo que está diciendo la canción, lo que puedes escuchar.
El mensaje: que el mensaje de la canción no insulte la dignidad de la vida humana, que no sea en contra de algo o alguien.
La carátula: simplemente observar la portada del disco compacto y ver si tiene relación con el disco. Si no concuerda te darás cuenta de que algo anda mal.
El cantante: que sea un buen ejemplo, de buena conducta.
El ritmo: se ha comprobado que el “heavy metal” hace daño al sistema nervioso central, por lo que se debe evitar escuchar este tipo de música.
El volumen: esto depende completamente de cada personas, sin importar que canción sea debes preocuparte por la salud de tus oídos.
Poseer la canción: esto no se refiere a poseer los derechos de autor o algo por el estilo, sino a que tú tengas el poder de decidir si seguir escuchando la canción o no, que la canción no te controle a ti.
Si descubres que una canción usa la técnica “reverse speech” lo que se puede hacer es lo siguiente:
Si la canción se encuentra en CD, pasarla antes que nada a un cassette.
Desarmar el cassette, es decir, quitar la cubierta de plástico.
Dar vuelta a los carreteles para que queden hacia arriba.
Colocarlos de nuevo, sin moverlo de esa posición, acomodando la cinta de manera que se pueda escuchar.
Poner de nuevo la cubierta de plástico, para poder escuchar el cassette.
(Aquí se muestra un esquema de cómo hacer dicho procedimiento)
Bibliografía.
Crecente Romero, F. (2002) El Sexo en la publicidad http://www.gestiopolis.com/recursos/documentos/fulldocs/mar1/sexpubli.htm#BIBLIO, 14 de Abril de 2005
Fundación Misericordia Divina (1995) Mensajes Subliminales http://www.santuario.com.ar/paginas/subli_explic.html, 14 de Abril de 2005
Moix Queraltó, J. (2005) Los Mensajes Subliminales http://es.catholic.net/comunicadorescatolicos/580/2004/articulo.php?id=18299, 15 de Abril de 2005
López, E. El Mensaje Subliminal, La revelación I. (Cinta de Grabación)
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